Sacar a la luz el símbolo de un pasado glorioso para restablecer la fidelidad en el futuro del «Quartieri Spagnoli», en el corazón de Napolés. Es el espíritu con el que Salvatore Iodice, ebanista conocido por sus obras de infraestructura urbana creadas a partir de residuos abandonados, se prepara para restaurar «El Mural Maradona» el icono más famoso del primer título de la liga obtenido por el equipo del Napolés, en el año 1987. Un mural arruinado por una ventana abierta sin consentimiento en el rostro de Diego. Gracias a la labor de Salvatore, Maradona recuperará su rostro.
La imagen del Pibe de Oro, descolorida por el paso del tiempo y asomada a la fachada de un edificio en la avenida Emanuele De Deo, desde hace más de treinta años, reproduce el momento en el que Diego corre detrás de un balón. Un diseño realizado por un jovén del barrio, Mario Filardi, desaparecido misteriosamente en Holanda. Era el año triunfante de la liga, toda la ciudad teñida de azul, representando las numerosas escenas de la victoria de aquel increíble equipo. Aquí, en el corazón de la ciudad, Quartieri Spagnoli, nació el más grande.
Hoy, último sábado del mes de Febrero, Salvatore Iodice –el artista que con sus obras no sólo ha dado un cambio cultural al barrio Español- ha comenzado a restaurar los murales después de casi un año de recolecta por su barrio y a “quebrarse la cabeza” para encontrar el mejor modo de sacar a la luz una nueva imagen de Diego: «Son muchas las personas que me han ofrecido dinero en todos estos meses, algunas 5 euros, otras 10, también cifras más elevadas, hasta 200 euros. He anotado todos sus nombres, han confiado en mi y ahora debo devolverles aquello que les he prometido», comenta.
Se realizará también un documental sobre el evento titulado –explica Salvatore- « “Ci metto la faccia”, porque yo digo siempre que no me echo nunca atrás, que por el barrio siempre doy la cara. Y ahora la cara se la devolveré a Maradona, por el bien de aquel lugar en el que vivo y trabajo».
En casi un año Salvatore ha recaudado 1000 euros, además de obtener la ayuda del ayuntamiento que le facilitará una grúa para subir y deslizarse por la fachada del mural.
Se tratará de una restauración completa fiel a la original, devolviendo sus colores y sus formas de aquel gigante Maradona.
Asegura el autor que, el groso se centra en el rostro de Pibe, y que una vez completado el resto será más fácil. Desde hace años, en la cara de Maradona se asoma una ventana perteneciente al apartamento del señor Ciro, que imediatamente se ha puesto a disposición de Salvatore: «gran supporter del Napolés. Cuando el equipo pierde un partido, ¡llora! Me ha contado que cada tarde una emoción de tristeza expresada en cólera se materializa al ver el rostro casi perdido del gran Maradona en su ventana. Dicha ventana ya existía cuando él compró el apartamento, no es su culpa. Hasta hace una semana, pensé de taparla directamente con pintura, pero después me ha venido la idea de montar un panel de madera que se abre como una ventana, y ayer mismo lo monté. Me ha dado la facilidad de entrar en su casa para hacerlo. Dicha ventana no la utilizaba casi nunca, como forma de respeto ante el rostro del jugador argentino, ahora se siente orgulloso de haber contribuido de alguna forma a sacar a esplendor de nuevo la imagen de Diego».
Mientras Salvatore se asomaba a la ventana del señor Ciro, ha descubierto que la oreja de Maradona está decorada por un pendiente: «un brillante de cristal tipo Swarovsky. La vecina me ha contado que ellos vendían arneses y cremalleras y que lo donó al chico que hizo el mural. Me ha dicho que lo pegaron con Attack, y resiste a sus más de treinta años. Creo que lo reforzaré con silicona y pintaré el entorno».
Salvatore cuenta que hay días en los que no duerme porque piensa en Maradona: «He impreso el diseño de cuando era intacto para entender como moverme en la restauración. Me golpea una gran tensión, todos los ojos apuntan sobre mí, me llaman los periodistas a todas horas. Yo sólo pienso que debo hacer este Maradona como se debe, llevarlo a su esplendor original. ¡Devolverlo al barrio!»
Para Salvatore esta labor tiene un valor altamente simbólico: « El éxito de este proyecto supondrá un punto de partida para el renacimiento del barrio. Cumpliremos un sueño. Hace años que la gente no puede admirar la figura de Maradona por su desgaste. Es la enésima vez que se intenta realizar el proceso de resurgimiento. Aquí en el Quartieri Spagnoli no se dispara más, no se vende solo la droga, el tiempo del antiguo oeste ha terminado».
(Articolo di Ilaria Puglia, traduzione di Cristina Zamdom)